Posted by : Misery no fansub martes, 4 de noviembre de 2014

Parte 2

Había pasado una semana desde la exitosa operación, y la puntuación del escuadrón 35 había cambiado, para bien, de forma cataclísmica. Desde que el ‘Salmo Sin Rastro’ había sido recuperado hasta ahora, habían confiscado otros tres Legados Mágicos. Rumores de la semana de logros del Escuadrón de los Debiluchos llegaron a miembros de otros escuadrones. Habiendo dicho eso, la única que era bien evaluada era Ootori Ouka. De los otros miembros se pensaba que eran aún más miserables que antes. Ouka camino por el corredor que daba a los salones de primer año. Caminaba con su espalda erguida mientras pasaba frente a estudiantes petrificados que tenían sus miradas fijas en ella.

“Oye mira, ¿no es ella la que se unió al Escuadrón de los Debiluchos como parte de un acuerdo especial?”

“¿Por qué no dice nada la ex Dullahan? También es la primera vez que he visto un Dullahan…”

“¿En sólo una semana incautó tres clasificaciones D por sí misma? Eso es sorprendente… Las habilidades de los Dullahans son verdaderamente asombrosas.”

“Es hermosa, su estilo es genial y también es muy fuerte. ¡La admiro!”

“¿Pero por qué fue asignada al Escuadrón de los Debiluchos? Si viniera a nuestro escuadrón, ¡sería facilísimo alcanzar nuestra cuota de ascenso!”

“Hay un rumor que dice que el Escuadrón de los Debiluchos era tan malo, que el Director llamó a un profesional para ayudarlos. ¿No es eso injusto?”

“Eso es cierto, es un desperdicio de recursos humanos. Ve a ese montón de inútiles, ¡especialmente el capitán! Mira sus ojos llenos de maldad, ¡Y esa espada colgando de su cintura! ¿No debería darse cuenta ya de que es inútil?”

“¿Qué no está ese escuadrón en último lugar por su culpa? ¡En serio!”

Caminando 5 metros detrás de Ouka, estaba el trio del escuadrón 35. Brevemente, los estudiantes los miraron con desprecio. En primer lugar, él ya estaba acostumbrado a esta clase de cosas y debería haberse reído de ello, pero por primera vez estaba preocupado. Si un ayudante de primera clase entraba a su escuadrón bueno para nada, era de esperarse que se escucharan quejas de otros estudiantes por todos lados.

Aún más que normalmente, los miembros, a excepción de Ouka, caminaban penosamente por el pasillo. Al terminar las clases matutinas, Usagi golpeó fuertemente el escritorio con ambas manos.

“¿¡Qué significa todo esto!? ¿¡Ouka Ootori!?”

Le cuestionaba Usagi. Ouka, que estaba realizando el mantenimiento de su arma, inclinó el cuello con una expresión fría.

“¿El significado de qué?”

“¡Tu actitud todos los días! ¿Nos tomas por idiotas?”

“Esa no era mi intención. Si fui grosera, me disculpo; perdón.”

Después de escuchar una respuesta tan directa de Ouka, Usagi dejó salir un agudo grito: “Kiiiiiiiiiiiihh”

“Te dije que te explicaras, ¡No que te disculparas!”

“Por eso, ¿de qué?”

“¿¡Por qué actúas egoístamente y nos excluyes de las investigaciones, y sigues trayendo Legados Mágicos arbitrariamente!? ¡Estamos perdiendo toda nuestra dignidad por eso!”

“¿No está eso bien? Ustedes pueden ganar puntos sin hacer absolutamente nada. ¿Por qué estás insatisfecha?”

“¡No queremos una máquina automática de hacer puntos! ¿¡Sabes lo mal que nos sentimos por tu juego de una sola persona!?”

“Si quieren trabajar, trabajen en algo más. Estoy bien sola.”

Ouka había estado usando ese tono desde el incidente del ‘Salmo Sin Rastro’. No era un misterio que Usagi estuviera enojada. Ni siquiera a Takeru lo convencía. “¿De qué se trata esto…?” era lo que se preguntaba. Usagi tenía la cara roja, y parecía que estaba a punto de sacar vapor por las orejas. Caminó hacia Ouka con la intención de agarrarla.

“Es la primera vez… que alguien me ha insultado tanto… ¿¡Quién demonios crees que eres!?”

Takeru detuvo a Usagi, quién estaba a punto de correr hacia ella. Trató de apaciguar al rebelde corcel sobando su espalda.

“Detente, es una pérdida de tiempo hablar con esta mujer. Sólo está interesada en su propio bienestar.”

Le dijo Ikaruga a Usagi mientras leía una revista ero, acostada sobre el escritorio de servicio. Al escuchar sus palabras, Ouka dejó salir un pequeño suspiro.

“Les diré una cosa. Esta es la mejor ruta para el escuadrón 35 y para ustedes, chicos.”

“Hee ¿la mejor ruta para nosotros? ¿Por qué no sólo nos dices por qué o cómo demonios se te ocurrió semejante conclusión?”

Ikaruga hizo la pregunta mientras dejaba la revista de lado. Sonreía con osadía al cruzar sus brazos. Ouka respondió.

“… en ese caso, diré esto claramente.”

Dejó su arma favorita mientras se ponía de pie. Todos los miembros la miraban. La habitación se había quedado callada, con las miradas de todos fija en Ouka. Ella espetó las siguientes palabras con indiferencia.

“Su mejor opción es hacer nada.”

Ikaruga agudizó su mirada, Usagi se levantó y quería decir algo, y como era de esperarse, Takeru frunció el ceño.

“¿Qué… quieres decir?”

Preguntó Usagi.

“Quiere decir que si se despliegan, simplemente, con sus habilidades si van contra las organizaciones locales que poseen Legados Mágicos, la posibilidad de que ustedes mueran es alta.”

“Qu… ¿Estás diciendo que somos deficientes?”

“Si soy yo sola, la tasa de éxito y supervivencia es más alta.”

“¿¿Qué dijisteeeeee??”

“Primero, Saionji. Hay una falla mortal en un francotiroteo. Un francotirador es el apoyo en muchas de las misiones, y se supone que ayudes en la retaguardia en territorio enemigo. Sin embargo, tu pánico escénico causa que dispares en direcciones completamente equivocadas mientras tus aliados son derrotados. No quiero encargarle mi espalda a una persona así. Si es posible, no quisiera que tocaras el rifle nunca más.”

“Gu….nghh.”

Usagi hizo cara de frustración mientras aparecían lágrimas en sus ojos. Entonces, Ouka miró a Ikaruga.

“Suginami, tú también. Admitiré que tu habilidad de mantenimiento es increíble como siempre, pero esta vez fuiste demasiado lejos. No remodeles mi arma sin permiso. No la equipes con auto completo. De todos modos no podré usarlo por su baja capacidad para municiones. Y claramente es un remodelado ilegal.”

… y eso fue lo que hizo. Takeru no podía usar pistolas, pero aun así estaba impresionado.

“¿La capacidad de la recámara no importa, o sí? Mientras la sostengas en tu mano de forma adecuada deberías poder manejar el culatazo.”

“Incluso si ignoramos un caso de culatazo, ¿cómo vas a explicar el automático completo?”

“¿Te refieres al cañón?”

“La recámara guarda solo nueve rondas. Además, los escuadrones de prueba no tienen permitido usar partes alquímicas que no sean las otorgadas por la academia. Los componentes claramente fueron traídos del exterior.”

“Ten algo de sentido del romance. Deja pasar ese poco—“

La opinión de Ikaruga sobre el romance estaba bastante sesgada. Ouka desfiguró su boca en desagrado, pero consideraba inútil razonar con Ikaruga. Se puso de pie ruidosamente, empujando la silla. Entonces se movió hacia Takeru, quién estaba sentado al lado de la enormemente abatida Usagi, y lo miró directamente.

“Y el último es… Kusanagi.”

Aunque usó una voz sin emoción alguna con los otros dos, fue diferente con Takeru. Takeru estaba clavando a su silla con la espalda erguida, un sonido de *tragar* salió de su garganta. La cara de Ouka se mostraba claramente disgustada.

“No deberías permanecer como capitán un segundo más. Lo que les dije a estas dos, debería hacer salido de tu boca. ¿Quieres que tus compañeros mueran?”

Ella estaba completamente acertada. No había manera de refutarla. Takeru estaba consciente de ese punto, ¿pero podría él hablarles altiva y duramente a sus subordinados cuándo el difícilmente era mejor? Siempre terminaba pensando así, y sería realmente patético si ese fuera el caso.

“¿O tal vez no quieres actuar mandonamente porque tú mismo no eres mejor?”

Habían visto a través de él.

“… eso es lo que te descalifica como capitán.”

Era incapaz de darle alguna respuesta. Una persona con una actitud como la suya no era apto para ser capitán. Ni siquiera podía decir algo desaprobatorio sobre si mismo. Eso es lo que Takeru pensaba en esa situación.

“… es cierto, puede que eso sea verdad.”

Takeru sintió el usual dolor de estómago, y por alguna razón el cabello de Ouka se agitó, sus ojos se abrieron muy grandes, y su expresión de endureció aún más.

“¡Ni siquiera estás calificado para convertirte en un inquisidor…!”

Ouka dejó ver su furia, se acercó a Takeru y lo tomó por el saco. Incapaz de reaccionar ante la situación, fue jalado hacia ella.

“…Ootori.”

“El director me dijo acerca de tu motivación… quieres este trabajo por el dinero, maldito snob… ¡me das pena!”

“…¡¡!!”

“¡La Inquisición se pudre a causa de bastardos malvados como tú!”

Takeru estaba retraído. En ese momento, su visión se había teñido de rojo, y estaba a punto de regresar a su viejo yo.

No me merezco que me digas esas cosas.

¿Qué es lo que tú sabes de mí?

¿¡Qué es lo que sabes –acerca de nosotros!?

Fue la respuesta que Takeru se contuvo de dar. Si solo veías la superficie, Ouka no sabía nada de Takeru. Pero lo contrario también era verdad. Takeru no sabía nada de Ouka. Es por eso que aguantó y no dijo nada. Se lo tragó.

“En serio que te comportas altanera al evaluarnos, pero ¿en realidad estás calificada para hacer eso?”

En ese momento, Ikaruga dijo eso sentada desde una silla.

“…¿qué?”

“Dices que Kusanagi no está calificado, ¿pero qué hay de ti? En primer lugar, Ootori ¿no regresaste a la academia porque te arrebataron tus calificaciones?”

Calmada e indiferente, Ikaruga acusó a Ouka. Al decirle eso Ikaruga, Ouka bajó la mirada y se mantuvo en silencio.

“Sé cómo te llaman tus compañeros Inquisidores.”

“…¡¡!!”

“'Calamidad'(1) , desobedeciendo órdenes y matando a los culpables. Conviertes cualquier escena del crimen en un mar de sangre, como una plaga. Eso no es algo que un ser humano normal haría.”

“…tú… me investigaste sin mi permiso…”

“¿No se aplica eso a ti también? Tú también investigaste a Kusanagi y a sus ambiciones sin permiso.”

“Ese fue… ¡del director…!”

Después de decir dos palabras, se tragó el resto de ellas, y apretó el puño ruidosamente.

“……”

Al final, no objetó ante la réplica de Ikaruga. Cerró los ojos y se dio la media vuelta sobre sus talones.

“Las cosas que dijiste de mí… no las negaré. Pero lo que respecta a las actividades del escuadrón, no tengo ninguna intención de cambiar mi opinión. Como lo veo, Kusanagi claramente no está calificado para ser capitán.”

Los sentimientos de Ouka regresaron a la normalidad. De nuevo era su yo normal. Dándoles la espalda, Ouka caminó hacia la salida.

“Lo mismo acerca de las otras cosas que dije, lo de la probabilidad que mueran durante una misión fue acertado. Me niego a caer junto con ustedes.”

“”………””

“Eso es todo lo que tengo para decir.”

Dejando esas palabras en el aire, Ouka salió de la habitación.

*clang*

En el silencio incómodo que dejó atrás, resonó un tosido seco.

“Confía completamente en sus propias habilidades, y no cree en nada más que en ella misma.”

“Bueno, las cosas que puntualizó están vagamente correctas.”

“Parecía que fue especialmente apasionada con tu caso, Kusanagi. ¿Pasó algo entre ustedes?”

Takeru recordó mentalmente los eventos de hace una semana. Al recordar cuando su mano agarro el suave bulto, se sonrojó. Después de ver la cara de Takeru, Ikaruga puso una barra de menta que se encontraba sobre el escritorio, en su boca y miró hacia el techo.

“… mocoso pervertido.”

“¿¡!?”

Miró a Ikaruga sorprendido. ¿Podía ser que la radio estaba encendida ahí dentro, y ella escuchó todo lo que había pasado? Los hombros de Takeru se desplomaron.

“He escuchado que su reacción ante brujas y criminales es anormal. Es obvio su odio.”

“Entonces en realidad la investigaste… así que estabas buscando una manera de lidiar con Ootori también ¿huh?”

“No, estaba buscando su debilidad.”

“…es eso, después de todo…”

Ikaruga meditó la observación de Takeru.

“No tuve que investigar demasiado. Su apodo ‘Calamidad’ es bastante famoso. Sí recuperó una gran cantidad de Legados Mágicos, pero el número de personas que ha matado también es sorprendentemente grande.”

“……”

“Me pregunto si es por algo que ocurrió en su pasado… Aunque en realidad no estoy tan interesada.”

Agregó, y chupó una chupa-chups y un dulce de menta. El número de personas que mató de un tiro era alto. Por casualidad Takeru también sabía algo de eso. En el caso del ‘Salmo Sin Rastro’ el otro día, se dio cuenta de cuán peligrosa era ella en realidad.

‘…Los exterminaré bastardos… a las brujas también… ¡a todos!’

Había un gran odio dentro de esas palabras. Como miembro del mismo escuadrón, sería una mentira decir que no estaba interesado.

“Esa tipa, siempre estaba sola. A causa de su actitud, nadie estaba dispuesto a acercarse a ella y de todos modos ella persistentemente decía que NO a todas las invitaciones. La razón de ello… era su ejemplarmente seca personalidad. Bueno, por algo, ella tiene muy mal carácter.”

“”………””

“¿Qué me ven ustedes dos?”

“”¡Tú no eres alguien que deba decir eso!””

Dijeron los dos al mismo tiempo.

“¿Qué?”

Dijo Ikaruga mientras comía otro dulce de menta. La atmósfera se relajó, Usagi era inesperadamente débil argumentando y estaba asustada durante la confrontación con Ouka, pero ahora regresaba a la conversación con su habitual arrogancia.

“Dioos, ¡esa mujer simplemente no puede ser honesta! ¿¡Por qué no puede hacerlo adecuadamente!?”

“… ¿hacer qué, Usagi?”

“Es acerca de Ootori Ouka, ella es terriblemente torpe. Debería ser más honesta con sus sentimientos.”

“Fuuu… ¿sabes algo de ella?”

¿Por qué no nos dices? Parecía inquirir Ikaruga de Usagi, quién mostraba una actitud engreída. Usagi resopló, inflando orgullosamente su gran pecho.

“Obviamente, les diré, porque soy una damisela modelo.”

“Jaa.”

“Es simple, escuchen. Esa mujer no tiene amigos, y ella quiere convertirse en nuestra amiga, pero es torpe y no puede hacerlo. Es por eso que se apega a ti, el capitán. ‘Soy mejor que ustedes, así que por favor ¡déjenme ser una de sus camaradas!’, así es como nos pide que la aceptemos. Es fuerte pero no es honesta. ¡Definitivamente haré que se vuelva nuestra amiga!”

“Con esa actitud, parece que se rehusaría descaradamente.”

“En otras palabras… ¡Ootori Ouka sólo se siente sola…! Fufufun”

Usagi infló aún más su pecho, luciendo orgullosa. Coincidentemente, ésta vez fueron Ikaruga y Takeru los que tuvieron la misma impresión.

“”¿No se trata eso de ti?””

Ambos pensaron en voz alta.

“¿¡Quue!? ¿Están diciendo que me siento sola?”

“Estuviste sola en la secundaria, y sin un solo conocido. Además, si tienes la solitaria expresión de alguien que ha sido abandonado.”

“¡Y-yo no me sentía realmente sola ni nada!”

“Pero eso no cambia el hecho que no tuviste ni un solo amigo.”

“Guhhh”

“¿Me pregunto si los conejitos realmente mueren cuando se sienten solos?”

“¡¡Nghhhhhhh Suginami Ikarugaaaaaa!!”

*bam**bam*, Usagi corrió hacia Ikaruga sacando humo, pero fue detenida antes de llegar por una única mano presionada contra su cabeza. En la ruidosa habitación del escuadrón, Takeru estaba pensando en que hacer a continuación. Lo que Ouka dijo era verdad; incluso si trabajaba sola, ella ganaría puntos para ellos. Pero de esta manera, no significaba nada tener un escuadrón. Como el capitán, sentía que era una opción inaceptable para ellos tres.

Actuar como un capitán… el hecho es, que Ootori estaba casi completamente acertada. Debería pensar en el futuro de nuestro escuadrón.

Se rio irónicamente.

Como una miembro del escuadrón, ella quiere ser reconocida, ¿huh?

Si era posible apoyarse los unos a los otros, entonces eso los llevaría a una mejora general en sus habilidades. Previamente, no eran capaces de cooperar apropiadamente. Para sumar el poder de pelea de Ouka al suyo, hacer que les brindara sus habilidades, que cooperara con ellos… no, no tenían que llegar tan lejos. Incluso si pudieran solo lograr que se asociara con ellos, definitivamente se producirían buenos resultados. Sobre todo…

“… hacerla nuestra camarada. Sería bastante difícil en este momento.”

Takeru se levantó de su silla y se acercó a las otras dos. Suavemente posó ambas manos en la mesa y cerró los ojos.

Ahora que ha llegado a esto, no desperdiciemos el conocimiento de los libros que has leído.

Pensó Takeru desde el fondo de su corazón.

“–tengo una propuesta.”

Al abrir sus ojos, un sentido de tener una misión y confianza en sí mismo se veía en ellos.

Unos minutos después… Tres personas estaban pegadas a una pared en la entrada de la cafetería y asomaban sus cabezas al interior. Estaban ojeando el interior con un catalejo, aparentemente observando algo. Desde el exterior, se veía muy extraño. En su línea de visión estaba su blanco… Ootori Ouka.

“… blanco adquirido.”

“Como esperaba, está comiendo su almuerzo sola.”

“¿El menú de almuerzo? ¿Cuál es su menú de almuerzo?”

Ouka estaba sentada sola en el asiento junto a la ventana, con cara de enojada. Y sobre la mesa había…

“… anpan y leche… ¿¡por qué anpan y leche!?”

“Anpan y leche… esa tipa es justo como Kusanagi.”

“¡Oigan! ¡No se burlen del anpan y la leche! ¡Es súper delicioso! ¡Cuesta sólo 160 yen incluyendo la leche! Es sabroso y suave con la cartera; ¡la combinación más poderosa!”

“”¡Haces demasiado ruido!””

“… perdón.”

Takeru, que no podía quedarse callado, demostró cómo se sentía al respecto del anpan y la leche y fue regañado, causando la caída de sus hombros. Continuaron observando a Ouka. Ouka abrió la leche, y usó ambas manos para sacar el anpan de la bolsa. Entonces repentinamente detuvo sus movimientos y *gira**gira* empezó a mirar a su alrededor cautelosamente. Los tres se escondieron apresuradamente.

“¿Por qué esta tan vigilante durante la comida?”

“… seguramente hay algo.”

“¿H-hay algo especial acerca del anpan y la leche…?”

“Tenemos que esperar a que baje la guardia, ¿pero por qué está tan tensa?”

Los tres respiraron y pasaron saliva, mientras Ouka finalmente se llevó el anpan a la boca. Y entonces… *munch*

“Está comiendo”

“Ajá, comiendo”

“Comiendo”

Ella estaba solamente comiendo anpan, pero ellos tres comenzaron a sudar. Sus raros gestos atraían las miradas de la gente a su alrededor. Mientras tanto, Ouka alcanzó la botella de leche, y tomó un trago. Después de unos segundos.

“. ͠ . ͠ . ͠ . ♪”

La enojada cara de Ouka se derritió como el hielo.

“”………””

De la nada ella había hecho una cara increíblemente adorable. El trío se había quedado sin palabras; era como si ella se hubiera sumergido en aguas termales. Intentó desesperadamente ocultar de nuevo esa expresión.

“………”

Y de nuevo, en el momento en que le dio otra mordida al anpan, su expresión volvió a la de antes.

“. ͠ . ͠ . ͠ . ♪*Mmm munch*”

Y de nuevo, su expresión enojada volvió. Mirando atentamente, se podía ver que felizmente pataleaba con suavidad cuando se llevaba el anpan a la boca. Era la primera vez que el trío había visto una escena como esa, en la que ella mostrara tal expresión.

“… es su favorita, esa cosa.”

“Fuu… es tan torpe, no esconde ni un poco su expresión de felicidad.”

“Ella es… inesperadamente normal.”

Takeru y Usagi estaban demasiado sorprendidos por la diferencia en su comportamiento de todos los días como para comentar algo. Ikaruga sonreía como loca y disparaba el obturador repetidamente.

“Fufu, ufufufufufu, usar… ¡puedo usar esto! Puedo usar esto en varias maneras contra esa orgullosa mujer. C-con esta muestra de su debilidad, me pregunto qué tipo de cosplay haré que use…”

“Oye, ¿para qué estas tomando fotos? ¡Venga, nos regresamos!”

“¿¡A-anpan después de todo!?¿¡Una heroína cuya única amiga es una pistola!? Qué si hay problemas con los derechos de autor, ¿¡qué hago Kusanagi!?”

“Nos retiramos, ¡ya vengan!”

Después de agarrar a Ikaruga, que reía como loca, del cuello los tres salieron volando del lugar en el que se habían escondido.

…Una hora y media después.

“…. Ciertamente, cuando escuché tu propuesta de acercarnos a ella, creí que iba a ser más… más como… bueno, ¿diferente?”

Dijo Ikaruga con desagrado. Estaba sentada junto al escritorio, haciendo origami con una tijera en mano. Aunque protestaba, sus manos no dejaban de moverse. Después de doblar origami cuatro veces, usó las tijeras para cortar por la línea haciendo un sonido de *snip*. La monótona tarea de hacer la cadena y conectarla con pegamento había continuado ya por una hora.

Las decoraciones que Ikaruga hizo colgaban por toda la habitación del escuadrón. Una tela blanca colgaba del techo y en ella estaba escrita ‘Escuadrón de los Debiluchos ☆ Fiesta de Bienvenida para la nueva miembro’ con descuidada escritura. Era la epítome del masoquismo llamarse a sí mismos el ‘Escuadrón de los Debiluchos’.

“Jaa, ¡con esto Ootori debería abrirnos un poco su corazón!”

“Es una idea que se le habría ocurrido a un estudiante de primaria.”

“¡Pero en este libro de ‘Cómo Establecer un Vínculo con su Nuevo Empleado’ dice que una fiesta de bienvenida es muy efectiva!”

En verdad que es un principiante cuando se trata de actuar como alguien listo. Pensó Ikaruga mientras echaba una mirada a Takeru.

“¿Crees que robocop estará contenta con esto?”

“¡No lo sabremos hasta que lo intentemos!”

“Irreparablemente raro… de esperarse de un capitán de escuadrón sin amigos.”

“… bueno, no tengo ninguno.”

“Yo tampoco tengo ninguno.”

Aunque condenó a Takeru con su cara luciendo sorprendida, sus manos no se detuvieron. Como era de esperarse de una aspirante a Regin, sus manos eran realmente hábiles.

“Aunque digas eso, aún nos estás ayudando apropiadamente.”

“Estoy haciendo esto porque es una orden del capitán. Además, aunque no queda con Ootori, la idea en sí merece un elogio. Bueno, no entiendo por qué estás tan neciamente clavado con la idea.”

Incluso si Ikaruga no aprobaba a Ouka como persona, reconocía su habilidad. Takeru se rascó la mejilla con una tierna expresión en su rostro.

“Bueno, eso podría no ser suficiente.”

“Es como si te hubieras enamorado de ella.”

“… ¿eh?”

“Un chico se enamora de una chica, lo que le da una oportunidad para cambiar.”

“¡No es así! Como camarada, quiero hacer aunque sea algo pequeño por ella.”

Mientras Takeru trataba de negarlo, *tap tap tap* Usagi vino desde donde estaba la cocineta.

“¡Ya terminé Kusanagi! ¡Es satisfactorio aunque sea yo la que lo diga!”

Sosteniendo con ambas manos un plato con un gran pastel corto, Usagi se paró frente a Takeru llena de confianza en sí misma y crema en la mejilla. A pesar de usar de mala gana el delantal con patrones de conejos que Ikaruga confeccionó, le quedaba bastante bien. Takeru estaba realmente sorprendido.

“Usagi, en verdad eres buena cocinando.”




“Lo aprendí de mi abuela cuando era pequeña. Mira, es un pastel corto con relleno de pasta de frijol rojo y crema.”

“Fufufun.” Usagi infló su pecho, e Ikaruga la miró desconcertada.

“¿Pasta de frijol rojo y crema? ¿Sabe eso bien…?”

“Hmph… no te quejes antes de probarlo. Esto hará que esa mujer se vuelva loca.”

Le entregó pequeños platos a Takeru e Ikaruga con lo que parecían pequeñas porciones de prueba. Ikaruga actuaba como si estuviera a punto de probar veneno, pero los dos se metieron el pastel a la boca. *munch munch* Después de masticar un rato, ambos hicieron cara de sorpresa.

“…¿oh? Está delicioso, que inesperado.”

“Es verdad, es súper delicioso. Usagi, en realidad tienes talento.”

Después de escuchar la honesta opinión de Ikaruga y Takeru, junto con sus halagos, Usagi parpadeó sorprendida. Aunque antes estaba completamente confiada, de todos modos bajó la mirada con las mejillas enrojecidas.

“En realidad no estoy contenta de que hayas dicho mi nombre… pero que me halaguen así… Yo n-no esperaba eso.”

“No no, es verdaderamente bueno. Eres increíble, Usagi. Yo no puedo hacer nada que no sea mi esgrima.”

“… a-así es, así que es delicioso. Estoy contenta, realmente contenta. Que la gente lo coma alegremente… en realidad valió la pena hacerlo.”

Aunque parecía avergonzada, en el fondo ella estaba muy feliz. Se puso las manos en las mejillas y bajó la mirada. Sintiendo que se veía justo como su hermana menor, Takeru casi le dio una palmada en la cabeza instintivamente. Pero entonces…

“–voy a entrar.”

Todos se voltearon en el momento en que la puerta se abría al mismo tiempo que resonaba el sonido del golpeteo de la puerta. Takeru y los otros alcanzaron los petardos sobre la mesa. Y…

*pop*…… *pop*……………. *pop*

Unos cuantos sonidos completamente faltos de coordinación llenaron la habitación, ya que la sincronización del equipo estaba toda desordenada. Ouka entró luciendo una cara de sorpresa, y luego vio con desagrado a las piezas de papel de colores cubriendo su cabello. El aire dentro del cuarto se congeló.

“… ¿qué está pasando aquí?”

Mostraba una mirada realmente intensa. Aun así, Takeru sonrió estrechamente.

“… u-umm… para darte la bienvenida ho—“

Ahí fue cuando Takeru se dio cuenta del estado en que se encontraba Ouka. Su uniforme estaba sucio de sangre y tierra, y eso no era todo; ella tenía raspones en todo el cuerpo.

“… tú, ¿¡qué son esas heridas!?”

“Un enemigo mostró un poco de resistencia, y algo de combate no es inusual. He recuperado un Legado Mágico exitosamente, así que no hay problema.”

“No hay problema… ¿¡no estás sangrando!? Espera, no te muevas.”

“Más que eso, ¿qué clase de situación es ésta?”

Ouka entrecerró los ojos y escupió esas palabras ligeramente enojada. Vio fijamente a uno de los miembros, Takeru.

“… ¿organizando una fiesta en el tiempo de actividad del escuadrón? En serio haces lo que se te antoja, ¿no es así, capitán?”

“No, esto es… lo hicimos para ti…”

“…¿? ¿Para mí?”

“Verás, aún no hemos hecho una, ¿cierto? Una fiesta de bienvenida.”

“………”

Fue entonces que Ouka se dio cuenta de la tela colgando del techo. Mostró una confundida expresión por un momento.

“No sabemos mucho de ti, y tú a penas conoces algo de nosotros ¿no es así?”

“………”

“Así que pensé que primero deberíamos fortalecer nuestro compañerismo.”

Takeru mostró una amarga sonrisa. Ouka parecía alterada, sus ojos recorrían el lugar. No sabía cómo responder. Pero, gradualmente, apareció una sombra en su rostro. Su habitualmente fría expresión regresó y dio un ligero suspiro.

“… lo siento, no tengo tanto tiempo libre. Ustedes pueden hacer lo que quieran.”

“N-no digas eso. Suginami hizo las decoraciones, Usagi te hizo un pastel corto de pasta de frijol rojo y crema, y yo… difícilmente hice algo, pero por favor piensa en lo que las otras dos hicieron por ti.”

“No estoy de acuerdo con su amistoso comportamiento. A diferencia de ustedes, yo… no vine a la Inquisición a jugar.”

Habiendo dicho eso, Ouka volvió a abrir la puerta y dejó la habitación. Desde atrás, su perfil no parecía el de una persona enojada o de alguien que veía a los demás con desprecio. Solo parecía… muy solitaria. Takeru tomó el equipo de primeros auxilios, y salió apresuradamente de la sala del escuadrón, siguiendo a Ouka.

“¡Ootori!”

Ouka dejó de caminar y miró hacia atrás, molesta.

“¿Qué?”

“¿A dónde vas?”

“Eso no es asunto tuyo”

“Espera un momento. Esa es una herida terrible, tenemos que darte primeros auxilios por lo menos.”

La pierna izquierda de Ouka sangraba considerablemente, y se veía doloroso, como si hubiera estado en un accidente de auto. A pesar de eso, Ouka no mostró ninguna intención de encargarse de eso y comenzó a caminar vigorosamente de nuevo.

“Puedo hacer eso yo misma. Te lo dije antes, no tienen nada que ver contigo.”

“Somos miembros del mismo escuadrón, y soy tu capitán.”

“… actuar como un capitán en un momento como éste…”

Lo miró fríamente. Pero esta vez Takeru no dejó que lo apartara.

“Ajá, órdenes del capitán. Déjame tratarte en silencio.”

Frente a un extrañamente fuerte Takeru, Ouka suspiró como dándose por vencida. Se sentó en la banca del patio. Sacando una gasa y antiséptico de la caja de primeros auxilios, Takeru tocó suavemente la pierna de Ouka sin previo aviso.

“¿¡Uhh!?”

“¿Qué pasó?”

“No… nada, si vas a hacerlo… entonces hazlo rápido. Estamos perdiendo el tiempo.”

Ouka le ordenó a Takeru mientras miraba a otro lado con las mejillas ligeramente sonrosadas. Para poder ver la herida claramente, Takeru usó agua para lavar la sangre primero.

“Bien, a pesar de toda la sangre la herida no es tan seria.”

“Te dije que no era tan grave ¿o no? Se veía exagerado porque el movimiento hacía que sangrara más.”

“Pero sería bueno ir a buscar a un doctor de Seelie(2) , te podría quedar una cicatriz.”

“Eso no me preocupa, ya he tenido muchas heridas como estas.”

Habiendo dicho eso, Takeru estaba mirando fija e intensamente la pierna de Ouka.

“… ¿qué es lo que miras de esa forma?...”

Sus honestos pensamientos salieron de su boca, *pop* la cara de Ouka se sonrojó de repente.

“H-h… ¿hermosas?”

“Si, en verdad se ven hermosas.”

“¿¡Uhhh!?”

“No se ve a simple vista, pero tus músculos son flexibles y están bien balanceadas. Son casi perfectas.”

“… o-ooh, eso quisiste decir.”

“¿Qué más querría decir?”

“C-como sea. Cállate y termina.”

Ouka se volteó sonrojada, Takeru inclinó la cabeza. No quería decir que Takeru no estuviera interesado en la belleza de sus piernas como en una mujer, ni que fuera insensible. Era porque por el bien de los primeros auxilios, se deshizo de sus deseos mundanos, de otra manera volvería a ser el torpe Takeru. Probablemente empeorando la herida. Roció la herida cuidadosamente con desinfectante.

“nghh.”

“Perdón, ¿te dolió?”

“Está bien, estoy acostumbrada al dolor.”

“Jaja, dices cosas muy extrañas.”

“¿Qué hay de raro en lo que dije?”

“No puedes acostumbrarte al dolor, puedo decirlo por experiencia propia. Puedes aguantarlo, pero no significa que dejará de doler. Si expresas el hecho de que te duele, la carga mental será menor que si fueras a guardártelo todo. Es sólo un consejo para ti.”

Riendo ligeramente orgulloso, Takeru continuó con el tratamiento.

“……”

Ouka consideró las palabras de Takeru. Éste tipo dice cosas raras ¿verdad?, es lo que sus ojos entrecerrados parecían decir. Llorar de dolor cuando duele. Esas palabras parecían quedarse un poco en su corazón. Hasta que el tratamiento de primeros auxilios terminó, Ouka se sentía cómoda, y su mirada vagaba por ahí tímidamente.

“Okay, está listo.”

Dijo Takeru dándole un golpecito con su mano, y procedió a limpiarse el sudor de su frente. La herida en su pierna estaba envuelta con una absurda cantidad de vendajes, parecía un bulto.

“… siento como si mi movilidad se hubiera reducido drásticamente.”

“A-ajaja… soy realmente torpe ¿verdad?”

En el apuesto rostro de Takeru apareció una sonrisa burlona mientras se rascaba la cabeza. Después de ver su inocente expresión y pensar que debió haberlo hecho ella misma, perdió la voluntad de culparlo. Ouka tocó la raramente vendada herida en su pierna, y se paró con cara de perplejidad.

“… N-no te agradeceré, es algo que hiciste egoístamente sin permiso.”

“Está bien. Como compañero, ¿no es algo que obviamente haría?”

“……”

Esta plática de ser camaradas era tanto cómoda como desagradable para ella, Ouka empezó a alejarse caminando de Takeru.

“Oye, espera. ¿A dónde vas?”

Takeru dejó caer torpemente el equipo de primeros auxilios, y corrió tras Ouka.

“Actividad de escuadrón. Iré a resolver otro caso.”

“¿Con tu pierna en ese estado? Es mejor que pares… o por lo menos que incluyas al escuadrón.”

“Eso no se puede. A quienes persigo son demasiado peligrosos para ustedes, chicos. Es algo aún más grande que el asunto de la vez pasada.”

“… aún mayor razón para no dejarte ir. ¿Qué estás persiguiendo Ootori, un Legado Mágico? ¿Una bruja?”

“No es asunto tuyo.”

“Lo es. Soy tu capitán.”

Takeru de nuevo usó su autoridad como capitán, insistiendo con fuerza. Ella se detuvo a regañadientes, y enfrentó a Takeru con una seria mirada.

“… ¿recuerdas el caso de los ‘Salmos Sin Rastro’?”

“¿Ajá?”

“Aún no ha sido resuelto.”

Al decir eso, Takeru recordó que ciertamente era verdad. Cuándo entraron apresuradamente, perdieron al socio del intercambio.

“El más grande misterio ahí fue qué tan bien armados estaban, definitivamente era demasiado para unos simples maleantes o mafiosos. Si incluimos tu testimonio, parece que el ‘Salmo Sin Rastro’ no era el artículo principal en el intercambio.”

“¿De pura casualidad has encontrado alguna información al respecto del otro bando?”

“No, aún no he llegado tan lejos. Incluso si me dieron prioridad para interrogar a esos tipos, no dieron ninguna información de utilidad. Sólo el hecho, que el objeto intercambiado era el fragmento de un Legado Mágico. Lo único que fueron capaces de identificar fue una cuchilla, así que debió tener forma de espada.”

“Un fragmento… ¿no se vuelve inútil el Legado Mágico después que su forma física es destruida?”

“En efecto, estaban intercambiando algo que supuestamente no tiene un gran valor tan grande. Eso quiere decir que es poco probable que el otro bando sea un traficante o un coleccionista.”

“¿Por qué?”

Por un rato un signo de interrogación flotó sobre la cabeza de Takeru. Ouka reveló la irritada expresión que había escondido hasta ahora.

“¿Qué podría querer un principiante con un fragmento? La posibilidad de que el socio de intercambio sea un miembro de la sociedad mágica es muy alta.”

“También, sociedad mágica… ¿un grupo de brujas y hechiceros? ¿Ese tipo de sociedades anacrónicas existen en estos días?”

Yo mismo me apego a mi espada, pero no hay ninguna ley contra ello. Pensó Takeru. Para las brujas modernas manejar una sociedad mágica sería extremadamente difícil. Sin embargo, Ouka no dijo que era una broma ni nada. Ella cerró los ojos.

“Valhalla, una organización envuelta en misterio. Es algo así como una asociación cultivando artes oscuras.”

Takeru había escuchado ese nombre antes, entre los rumores que aparecían ocasionalmente en la escuela, ésta era una popular leyenda urbana. Brujas y hechiceros que habían sobrevivido a la guerra formaban un equipo y buscaban derrocar a la Inquisición. Si esa historia fuera verdad, sería realmente escandalosa. Las brujas de antaño, no sabía cómo les iría a las armas de ahora contra esos abrumadores enemigos. En el pasado, había muchas brujas suficientemente poderosas como para destruir la ciudad instantáneamente con una descarga de mágia.

“Además, recientemente hubo otro extraño accidente. Ya que no hubo ni brujas ni Legados Mágicos involucrados, la investigación pasó a manos de la policía. Pero no creo que ese sea el caso. Esos tipos estaban intercambiando cadáveres por dinero. Las únicas que pueden usar cadáveres, son las brujas.”

“Pero… ¿esos dos casos están relacionados?”

“Así es, a estos tipos además les dijeron ‘También compraremos los cadáveres frescos que sean’.”

Takeru jadeó involuntariamente. Aunque aún era demasiado temprano para decidir si están lidiando con Valhalla, la conexión con el asunto del ‘Salmo Sin Rastro’ es realmente evidente. Él no tenía idea de cual demonios sería el propósito del criminal, pero pensándolo bien…

“Creo que se están preparando para algo, Valhalla o no, claramente algo tienen que ver las brujas y los Legados Mágicos con eso. Iré al lugar de reunión del culto del que me informaron.”

“¿Quieres decir que últimamente has estado investigando a los recolectores de cadáveres tú sola?”

“Ajá, los Legado Mágicos recuperados fueron consecuencia de ello.”

Que mujer tan agresiva… volvió a pensar Takeru.

“Bueno, está bien. Ahora que lo sabes, mantén la boca cerrada y regresa a la sala del escuadrón.”

“No no, espera. Si el oponente es Valhalla, ¿qué no entonces excede el alcance de los estudiantes? ¿No deberías reportar la información que obtuviste a un Dullahan?”

“Jajaa… los otros Dullahan están enterrados bajo una montaña de casos diferentes que no se relacionan con esto. De todas formas ellos no están en contacto conmigo. Incluso antes, cuando era una Dullahan, se hacían los sordos diciendo que es algo que está bajo jurisdicción de la policía. Resolveré este caso to sola.”

Al decir esto, una pequeña luz se encendió en los ojos de Ouka. Por la forma en la que hablaba, parecía que estaba investigando este asunto desde antes de ser despedida. En sus ojos podía percibirse algo parecido a la tenacidad. Pero Takeru no pensaba que fuera eso. Era tristeza y odio.

“…¿ahora lo entiendes? Las personas a las que persigo tienen un nivel demasiado alto para ustedes. La Inquisición no los reconoce como un blanco de adquisición. No obtendrás puntos por completar esta investigación así que no hay ningún beneficio para ti… no vengas.”

Incluso si vienes, sólo serás una molestia. Lo dijo de una manera que mostraba preocupación por los demás miembros. Ouka se alejó caminando ruidosamente. Takeru casi se detuvo, pero saber que Ouka estaba involucrada en algo tan peligroso y dejarla ir de todos modos lo habría descalificado como capitán.

“Iré contigo.”

“…¿por qué?”

“Porque… no puedo dejar que alguien que ya está lastimada se vaya sola. Ya que ni siquiera vas a escucharme si intento detenerte, mejor iré contigo.”

Ouka frunció el ceño abiertamente.

“Incluso si no te molesta, obstaculizará tus movimientos durante una emergencia.”

“No existe tal cosa, no me duele tanto.”

“Aún si lo soportas, eso definitivamente se ve doloroso.”

“¡Te estoy diciendo que no me duele!”

“¿Duele no es así?”

“No duele.”

“Duele”

“Eres persistente ¿verdad?”

“Eres una mala perdedora.”

Al ver que Takeru no cedía un centímetro, Ouka mostró una honesta expresión de enfado. Al final, la que se rindió fue Ouka. Después que Takeru y Ouka terminaron con los primeros auxilios, recogieron todo el equipo antes de dirigirse a la escena del crimen. Takeru propuso que incluyeran a Usagi e Ikaruga en el plan, pero la idea fue rechazada por Ouka. Él quería decirle que era prejuiciosa, pero iban a entrar a un espacio reducido así que un grupo pequeño sería mejor esta vez, así que al final estuvo de acuerdo con la opinión de Ouka.

El lugar era un puerto cerca del mar, en un lugar alguna vez llamado Bahía de Tokio. Era un almacén relativamente grande, erigido ahí solo en el pasto, cerca del campo de contenedores.

Aunque el almacén parecía un edificio abandonado cayéndose a pedazos, también se veía un poco extraño. A diferencia de su maltratada apariencia, los candados ahí instalados estaban nuevos. Había bastantes de ellos y estaban envueltos con cadenas. Definitivamente había señales de vida en éste lugar, Takeru y Ouka se pararon a ambos lados de la puerta y confirmaron la cerradura. Después de confirmar que podría abrirse usando un método convencional, Ouka sacó una escopeta recortada de una funda que tenía en la espalda.

Se la dio a Takeru, él supo que significaba que ella quería que destruyera el candado.

“…………… *furu furu furu furu*!”

“………”

Ouka no sabía de la maldición de Takeru para disparar. En serio, en el peor de los casos podría incluso darle a Ouka. Ella hizo una cara de decepción y apuntó a la cerradura con una escopeta después de tomar un poco de distancia de la puerta. Resonó un disparo ensordecedor, el candado había volado en pedazos, y la puerta se abrió. Takeru inmediatamente abrió la puerta de una patada.

“Idiota, yo debería ir –“

Ouka intentó detener a Takeru, en ese momento…

–*piin*, un sonido de como si algo hubiera sido jalado llegó hasta ellos. Lo que él vio fue la figura de Ouka abrazándolo repentinamente. Pero más que un abrazo, fue más como un tacleo. Ya que estaba indefenso, fue derribado.

En ese momento, el dulce olor de una chica entró por su nariz, sus labios casi se tocaban, a Takeru se le fue el aliento. El deseo casi acabó con su conciencia, y entonces, un tremendo rugido salió detrás de la puerta que estuvo a punto de atravesar apresuradamente.

Mientras tosía el humo, Takeru comprendió lo que pasaba.

“¿¡Podría ser… una trampa!?”

“¡Levántate!” “¡Tenemos que correr!”

Antes que Takeru se diera cuenta siquiera, la figura de Ouka corrió tras el almacén. Takeru la siguió inmediatamente. El motor de una van negra había empezado a correr, debió haber sido preparada para ser usada inmediatamente, como un escape de emergencia.

“Mierda… llegamos tarde.”

Mientras la van se alejaba de ellos, Takeru frunció el ceño.

“No, ¡aún no!”

Ouka cambió la cámara de su arma por una con balas reales y puso una rodilla en el piso. Y entonces, el cañón saltó de manera extraña mientras ella disparaba tres veces en una rápida sucesión.

La van ya era se veía tan pequeña como un guisante.

“Como era de esperarse, es imposible –“

Justo cuando Takeru iba a decir eso, la van en la distancia empezó a oscilar. Chocó con un contenedor en la cercanía, y aterrizó sobre el techo. La bala disparada por Ouka le dio a la llanta de la van.

“… Tienes que estar bromeando.”

“Realmente es sorprendente… pero el culatazo es un poco feo”

Dijo Ouka mientras sacaba la recámara de la pistola. Se levantó con una fresca expresión. Aunque parcialmente era gracias al arma especial de Ikaruga, que la ruta de escape del enemigo fuera en línea recta, y que no hubiera viento. Con esa pistola, a esa distancia, su reacción y su habilidad eran sin duda extraordinarias. Takeru no podía creer lo que había pasado frente a sus ojos.

“Kusanagi, revisa a los tipos de la van. Iré a revisar el edificio.”

“…E-entiendo, gracias por salvarme hace –“

“No me agradezcas, ¡sólo apresúrate!”

Después que le gritaron, Takeru corrió hacia el carro que había huido. Ya no estaba seguro de quién era el capitán. Esposó a tres personas que estaban ahí desmayadas, y rápidamente se dirigió al almacén.

Al llegar ahí, entró por la puerta trasera. Tan pronto como entró, notó ciertas anomalías dentro. Un olor extraño, un carnoso, nauseabundo aroma. Takeru se dirigió cuidadosamente por el corredor hacia la fuente del poderoso olor.

Al final del corredor, había una habitación que probablemente era un dormitorio. Detrás de la puerta completamente abierta, encontró a Ouka. Mientras se tapaba la nariz, miró el rostro de Ouka.

“……………”

Ouka tenía los ojos muy abiertos, estaba completamente inmóvil. Takeru intentó decir algo, pero entonces…

“Qué –gu… ¿¡ugh!?”

La intensidad del extraño olor no se comparaba con la de antes, se tapó la nariz involuntariamente. El color y el aroma de la sangre bañaban el cuarto, el estómago de Takeru se revolvió. Entones comprendió lo que pasaba ahí dentro.

–Ahí dentro, era el infierno.

Empacadas en bolsas de plástico, había numerosas partes humanas. Manos, piernas, torsos, cabezas. Estaban divididas en cinco, estaban empacadas en bolsas diferentes y estaban clasificadas por separado. Pero el verdadero problema era otro.

“…aaa…aa…”

Instintivamente, un gritito se le escapó de la boca. La cortina era movida de un lado para el otro por el viento. Cuando la luz del sol de la tarde iluminó la habitación. La pared estaba manchada con enormes cantidades de sangre. En medio de ese infierno, sobre una cama estaba un niño pequeño. El centro del pecho de ese niño estaba atravesado por un cuchillo.

“_______”

Sus ojos se entrecerraron, su expresión mostraba mortificación. Takeru se mordió el labio.

La ayuda que vendría a salvarte en el momento preciso como en las películas o en las novelas no vino. Eso era imposible en la realidad. La probabilidad de un rescate era nula. Él lo sabía, cuando decidió unirse a la Inquisición sabía que esto sería así. Estaba preparado para ver cosas como esta en las escenas. Si, estaba preparado para eso, pero aun así… esto era… Esto era la realidad.

“………………”

Ouka estiró su tambaleante mano hacía el frio cuerpo del niño. Con manos temblorosas levantó el cuerpo del niño, y lo abrazó como si estuviera abrazando a un bebé.

“…lo siento… llegué demasiado tarde,”

Una temblorosa, gentil voz.

“¿Fue muy doloroso? ¿Te dolió…? Pero ya no tienes que sufrir…”

Abrazando el cuerpo muerto del niño. Ouka acarició su mejilla.

“Lo siento… ya está bien… Onee-chan… cargará con todo eso…”

Este triste espectáculo, lleno de compasión, Takeru no podía mirarlo. Era demasiado triste. Inconsolable.

“Onee-chan lo hará… por completo.”

Fue por eso.

“¡Por completo…!”

Fue por eso, que tardó en darse cuenta del comportamiento anormal de Ouka. Mientras veía hacia otro lado, Ouka volvió a dejar al niño y sacó la escopeta detrás de su espalda. Al principio no entendió lo que estaba pasando, pero al ver a su espalda Takeru lo comprendió. No había balas de anestesia para escopetas. Estaba cargada de mortales balas de mithril. Ouka se proponía matar a las tres personas dentro del carro.

“ –¡Ootori!”

Takeru momentáneamente saltó frente a Ouka, quién estaba a punto de dejar la habitación para ir tras los criminales, y la detuvo.

“¿¡Qué estás haciendo!?”

“Muévete.”

“¡Detente, no puedes! Si matas aquí a esos bastardos, ¡no habrá más oportunidades para ti!”

“Suéltame”

“¡Ya para! Si los matas aquí, ¡todo se irá a la basura!”

“¡Suéltame!”

Ouka, enojada, intentó escapar del agarre de Takeru. Sus mejillas estaban empapadas de lágrimas, y sus pupilas mostraban toda la intensión asesina, estaban gritándolo.


Al verla tratar de irse luciendo como un espíritu maligno, un demonio. Takeru pensó que tenía que detenerla. Abrazó a Ouka desesperadamente, y ella bajó su arma.

“–¡No te dejaré! ¿¡Qué no te convertiste en una Inquisidora para evitar que la gente comparta el destino de este niño!?”

“…¡ughh…!”

“No te conozco pero… ¿¡pero definitivamente no quieres hacer eso o sí!? Si la riegas aquí, ¡no serás capaz de salvar a las personas que normalmente salvarías…!”

“Uu… uuu… ¡uuuh…!”

“¿¡Con eso te basta!?”

“Uuu… uuuhhh…”

La voz de Takeru al fin la alcanzó, y toda la fuerza dejó a Ouka. Se cayó de rodillas, soltando el arma. Ouka se cubrió la boca con una mano, vomitó y se desmayó en corto.

En el cementerio de la ciudad, ubicado muy lejos del ruido de la ciudad. El hermoso parque cubierto con hojas otoñales estaba cerca, así que era bullicioso durante el día. Voces de niños jugando en el parque, amantes intercambiando besos. Su felicidad se sentía muy distante y extraña a ellos.

Sentados ahí todos idos, mostrando una afligida expresión, esa era la impresión que daban a los otros visitantes.

“………”

Ouka estaba parada frente a una sola tumba. Había estado mirándola fijamente por una hora. Takeru estaba parado detrás de ella y la miraba.

Después del incidente, Takeru contactó a las tropas de Spriggan y Seelie. Dio un breve reporte y quería llevar a Ouka al hospital. Pero Ouka se rehusó, en vez de eso quería venir a este lugar ella sola. Takeru, no dispuesto a dejarla sola, la había seguido hasta ahora.

“… por lo de antes, perdón, no era yo misma.”

Dijo Ouka dándole la espalda a Takeru.

“¿Por qué viniste conmigo?”

“Porque estaba preocupado, obviamente.”

Respondió de inmediato. El cabello de Ouka se mecía suavemente mientras volteaba su cara hacia él.

“…… ¿Por qué?”

Una tierna voz. La voz original de Ouka era dignificada y segura, completamente diferente a la actual. Era una nunca vista, frágil expresión en el rostro de Ouka que causaba que la mirara fijamente aunque no fuera a propósito. Viendo su somnolienta, cansada figura, Takeru tenía una inexplicable urgencia por abrazarla inmediatamente.

“Eso es porque… soy tu capitán.”

“… otra vez eso.”

“Aun así, quiero que seamos camaradas. E-esta eso mal…”

“No hay manera en que una persona como yo sea tu camarada.”

Respondiendo a Takeru negativamente, Ouka miró de nuevo hacia enfrente.

“Esa es sólo tu desilusión hablando.”

“¿Desilusión?”

“Como el escándalo de hace rato, ¿por qué no hablas con honestidad?”

“… no hay nada que decir al respecto, sólo me sorprendió.”

Al escuchar la honesta respuesta de Takeru, Ouka sonrió con ironía.

“Creo que ya lo sabes… sin importar qué, no está bien. Cuando me enfrento a un enemigo atroz, la sangre se me sube a la cabeza. Pierdo mi conciencia y los ejecuto, jalo el gatillo y les disparo. Especialmente cuando las víctimas son niños.”

“…………”

“’Calamidad’… en verdad que es un apodo adecuado para mí.”

Incidentes en los que ella estaba involucrada, terminaban con un mar de sangre tras ella. Por eso era una ‘Calamidad’. Pero ella no lo hacía porque quisiera. Eso es lo que él sentía después de escuchar a Ouka. Definitivamente había algo muy en su interior que hacía que ella actuara de esa manera.

“Esa es la razón por la que me despidieron de la Inquisición. Realmente no estoy en posición para culparlos a ustedes. Estoy defectuosa y sin remedio alguno… así es como soy.”

Ouka dijo eso y suspiró, sacó el anpan y la leche que compró en una tienda en el camino, lo colocó como ofrenda frente a la tumba y juntó sus manos. Estaba en silencio de nuevo.

“… esta tumba, ¿es de tu familia?”

“…es de mis padres… y también de mi hermana menor.”

“Así que tenías una hermana.”

“Nn, tenía una.”

Ouka tocó la botella de leche con un dedo.

“… a mi hermana menor le encantaba, anpan con leche.”

Levantando ligeramente la voz, lo dijo con voz nostálgica. Era la primera vez que él escuchaba a Ouka hablar tan suavemente.

“Le dije que no había forma en que eso fuera delicioso… ‘Cómelo, cómelo’, quería hacer que lo probara a toda costa.”

Takeru guardó silencio y la escuchó, la escuchó en silencio.

“Yo fui muy obstinada, me rehusé a probarlo varias veces diciendo que era terrible. Y mientras ella seguía diciendo que era delicioso, inflaba los cachetes enojada. ¿Infantil no lo crees? Si es delicioso para ella, tiene que serlo para los demás. Eso era lo que ella pensaba.”

“………”

“… al final, no lo comí ni una sola vez cuando ella aún estaba viva.”

“……………”

“Incluso si… es tan delicioso.”

De repente, Ouka bajó la mano con que estaba tocando la botella de leche. Su cabello del color del atardecer fluía en el viento, flotando en el aire frío. Takeru vio la pequeña espalda de Ouka, y se veía acongojado. No debió escuchar, eso es lo que pensaba. Si apartaba sus ojos ahora, Ouka de nuevo caminaría sola. No podía evitar pensar en eso.

“… tu familia fue…”

“………”

“… y tu hermana…”

Las palabras que podría utilizar estaban atoradas en su garganta y no saldrían. En un momento como este, no podía lograr entrar a la oscuridad en la que se encontraba Ouka. Takeru se sentía patético. Pero antes que Takeru pudiera entrar,

“Oh… eso cierto.”

Ouka se levantó, lo miró vigorosamente. Y entonces, como si confrontara algo…

“Mi familia fue asesinada por una bruja.”

Lo dijo como si intentara sacudirse su propia oscuridad.

****

Notas al pie

(1) Princesa Loto Escarlata
(2) Curandero

Menú raíz

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