Misery No Fansub

Ouka era una huérfana. Al parecer había sido abandonada en un bote de basura, junto con el cuerpo de su verdadera madre. En el orfanatorio su corazón también se había cerrado, era una niña que no hablaba para nada. Los que recibieron a semejante niña, fueron los padres adoptivos de Ouka.

Un alegre padre, una gentil madre. Y una linda hermana menor. El corazón congelado de Ouka empezó a derretirse lentamente al interactuar con su nueva familia. Pero un día. De repente una bruja vino a su hogar.

“Bien entonces, por favor mata a tu padre y a tu madre.”

Una muy amable, espantosa voz.

“–Si haces eso, salvarás la importante vida de tu hermana menor.”

Era cuando ella finalmente estaba suficientemente familiarizada con su familia como para llamar a sus padres adoptivos ‘Mamá’ y Papá’. Por qué fue a la casa de Ouka, la razón era desconocida. La bruja que vino a su casa le entregó a Ouka un cuchillo. Y dijo:

“Si matas a tu padre y a tu madre, salvarás la vida de tu hermana menor.”

Ouka, quién odiaba llorar, lloró al no querer matarlos. Pero la bruja no se lo permitiría, temblaba de placer disfrutándolo, riendo, carcajeándose. Ouka no sabía qué hacer. No quería matar a su padre ni a su madre. Pero si no lo hacía… su preciosa hermana menor, perdería a su siempre sonriente hermanita.

El corazón de Ouka estaba destrozado. Se convirtió en una simple muñeca que lloraba. No podía sostener más el cuchillo, y trató de soltarlo. En ese momento su padre y madre la abrazaron, y se apuñalaron a sí mismos con el cuchillo que ella sostenía.

‘–Está bien…’

Sintió el calor a punto de desaparecer de la piel de su padre y madre.

‘–Va a estar bien…’

Escuchó sus gentiles voces.

‘–Dejamos a tu hermanita… en tu cuidado.’

Ouka se rompió.

“Lo hiciste bien… pero desafortunadamente.”

La bruja sonrió. Ruidosamente, alegremente, felizmente, la bruja esparcía la desesperanza. Ouka sintió que algo le quitaba libertad a su cuerpo, sus pies se movieron por sí solos, y se acercó a su hermanita sentada en el piso. Su conciencia estaba completamente lúcida.

‘–Me da miedo.’

Sintió el cuchillo en su mano.

‘–Me da miedo, Onee-chan’

Sintió como cortaba a su hermanita.

‘–Porq-ué… onee-cha-n…’

Ouka, estando completamente lúcida, cortó a su hermanita en pedazos. Quería gritar, pero no lo hizo. Quería llorar, pero las lágrimas no salieron. Su cuerpo no la escuchaba. Su corazón se rompía como el cristal. Quería matarse a sí misma en ese momento. Eso era lo que esperaba. Al final, la bruja le ordenó a Ouka.

“Ríete.”

Los músculos de sus mejillas se apretaron, a la fuerza su boca formó un arco. Y en una fuerte, ronca, pesarosa voz. Frente a su fallecida, amada familia. Ouka fue obligada a reír.